SEBASTIÁN DECAP
Los antibióticos como promotores de crecimiento fueron ampliamente usados a nivel mundial en animales de producción y en algunos países se siguen usando. Esta práctica y su uso indiscriminado generó un gran impacto relacionado a la resistencia bacteriana.
El gran problema de eliminar el uso de antibióticos como promotores del crecimiento en animales de producción ha sido tratar de no perder la performance de estos animales, para no generar un mayor costo en la crianza y así no impactar al consumidor.
Debido a esto, la industria ha optado por diversas alternativas tales como:
Estos últimos son considerados compuestos botánicos, estando ampliamente distribuidos en la naturaleza. La gran interrogante sobre estos compuestos se relacionan al posible mecanismo de acción, la presencia de compuestos activos y la medición acertada de estos compuestos activos.
Los extractos naturales funcionan de diversas formas en base a sus diversos principios activos. Por ejemplo:
Si bien los antibióticos han estado en el ojo del huracán durante las últimas décadas, los productos anticoccidiales han tenido un trato diferente. Así la Unión Europea prohibió hace más de 20 años el uso de antibióticos como promotores de crecimiento, pero no tocó a los ionóforos ni químicos.
La coccidiosis es probablemente la enfermedad más común en producción avícola, provocando grandes pérdidas en la industria, estimándose costos por más de 7 billones de dólares (Blake et al., 2020). La incidencia de coccidiosis en los planteles está asociada a diferentes factores como la alta densidad, humedad de la cama y estacionalidad.
Debido a esto, la industria ha optado por usar de forma continua programas anticoccidiales que incluyen productos químicos e ionóforos.
Así, el uso de extractos naturales surge como una alternativa en los programas anticoccidiales.
Uno de los extractos naturales más importantes y usados para el control de coccidiosis es en base a Quillaja saponaria o más conocido como Quillay. Un árbol siempreverde, endémico de Chile, el cual presenta como ingrediente activo las saponinas triterpénicas.
El efecto de las saponinas triterpénicas de quillaja frente a la coccidiosis, está modulado por la estructura química de este principio activo. Así las capacidades surfactantes (capacidad de formar espuma) que presenta el extracto de quillay, está altamente relacionadas con la capacidad de penetrar la membrana celular de las diferentes eimerias (agentes causantes de la coccidiosis).
La membrana de este protozoo posee una gran cantidad de lípidos los cuales tienen gran afinidad por las saponinas.
Así, estas penetran la membrana formando un complejo entre los lípidos y las saponinas que conlleva a una disrupción de la permeabilidad de ésta y posteriormente a la lisis celular, causando la muerte del protozoo.
Sumado a esto, el extracto de quillay posee una gran cantidad de polifenoles, los cuales presentan una potente capacidad antioxidante. Por ejemplo, el ácido p-cumárico posee similar capacidad antioxidante que el ácido ascórbico o α-tocoferol.
Se sabe que las coccidias pueden desarrollar resistencia a las drogas usadas en los programas anticoccidiales. Es por lo que nuevas alternativas, especialmente naturales deben ser estudiadas y validadas.
Diversos estudios y ensayos han demostrado los beneficios del extracto de quillay en aves sometidas a desafíos inducidos con eimerias, mejorando la integridad intestinal, disminuyendo la circulación de coccidias en el intestino y mejorando la performance de las aves.
En un reciente estudio realizado en Southern Poultry Research (Athens, GA, EE.UU.), pollos broilers suplementados con extracto de quillay y sometidos a un desafío de diferentes tipos de eimerias al día 14 de edad, mostraron similar performance (no estadísticamente significativa) que pollos desafiados y suplementados con anticoccidiales tradicionales.
Ambos grupos tuvieron mejor performance, disminuyeron los scores de lesión y los recuentos de ooquistes que las aves no suplementadas.
Se ha visto también que el desbalance entérico muchas veces es secuela de infecciones causadas por eimerias, seguidas por brotes de enteritis necrótica (Clostridium perfringens). Las saponinas triterpénicas de quillay tienen la habilidad de modular la microflora intestinal, incrementando el número de bacterias benéficas y aumentando las células asociadas a la inmunidad local del epitelio intestinal, reduciendo marcadores inflamatorios.
En otro reciente estudio se vió que aves desafiadas a eimerias y Clostridium perfringens suplementadas con extracto de quillay, presentaron mejores parámetros que aves no suplementadas, además de mejoras en la salud intestinal.
Hoy en día debido al aumento del escrutinio público en el uso de sustancias químicas en producción animal, no se puede descartar que los anticoccidiales tradicionales se puedan suprimir en un futuro cercano.
Debido a esto, el uso de ciertos extractos naturales, tales como los derivados de saponinas triterpénicas, surgen como una alternativa muy interesante. Lo importante es seguir entendiendo, validando y usando de forma correcta estas nuevas alternativas.